Organizar ceremonia y celebración en el mismo lugar, una buena idea
En la actualidad cada vez son más las parejas que deciden casarse por una ceremonia civil. Para este tipo de ceremonias hay muchas opciones, desde casarse en un Ayuntamiento, casarse en un espacio destinado a organizar ceremonias hasta casarse en el mismo lugar de la celebración. Sin duda la opción que ofrece más ventajas a los novios es la última.
Casarse en el salón, masía, restaurante o finca que hayan elegido los novios para el banquete no significa que tenga que ser una ceremonia fingida. En muchos municipios se realizan los trámites matrimoniales anteriormente para que el día de la boda una persona con autoridad (Alcalde o concejal) acuda al lugar de la ceremonia a oficiarla. Para ello los trámites deben hacerse en el mismo municipio donde va a tener lugar la ceremonia, pues los alcaldes o concejales sólo pueden actuar dentro de su término.
Los negocios dedicados a las celebraciones de bodas suelen tener un espacio destinado a la ceremonia que los visten con gusto para ese día. Los novios no tendrán que preocuparse por nada, ya que de la decoración, del sonido y de la logística se encarga el propio catering o restaurante. El personal del salón es experto en este tipo de celebraciones y conoce a la perfección el funcionamiento de las ceremonias.
El lugar de la ceremonia tiene la ventaja de poder personalizarse a gusto de los novios, pudiendo incluir los detalles que más les gusten. Además de acompañamiento musical de cuartetos de cuerda, coros u otras agrupaciones musicales.
Otra de las ventajas de organizar la ceremonia civil en el mismo lugar de la celebración es que los invitados no tendrán que trasladarse de un lugar a otro en coche. Así todos disfrutarán de la ceremonia y seguidamente del cóctel sin tener que coger el coche para ir de un lugar a otro.
Para los novios también resulta mucho más cómodo porque pueden hacerse la sesión de fotos familiar tras la ceremonia y mientras se realizan una pequeña sesión fotográfica por los alrededores de 10 ó 15 minutos los invitados ya estarán disfrutando del cóctel al lado. Tras las fotografías pueden acompañar a sus amigos y familiares en el cóctel, saludarlos y disfrutar de buenos momentos con ellos. Así los novios no se perderán ni un solo minuto de su día.